La elección del nuevo Papa esta sacando a luz un muestrario de estupideces y de intereses sectoriales.
Practicamente no hay programa de radio o televisión, y también prensa gráfica que no cuente con un Vaticanista como llaman a los entendidos en cuestiones del Vaticano.
Desde carteles callejeros al mejor estilo de campaña pre electoral política en Roma, todo es válido para descalificar a la Iglesia de Cristo.
Por que es definitiva es lo que no dicen, que se persigue a la Iglesia de Cristo.
¿Contra quien combate el demonio?
Por que esa fue parte de la misión de Jesús, poner en evidencia las obras del mal.
¿Se habrá terminado la eterna lucha del bien contra el mal?
¿Acaso una campaña mediática alcanza para que millones de creyentes en Jesús dejen de creer en El, la Persona del Hijo de Dios?
Lo que no consiguieron los emperadores romanos, ni Napoleón, ni Marx, pretende alcanzarlo un emporio de medios, que quizás hasta tengan que enfrentar a su propia verdad.
Concepción del Uruguay,Entre Ríos, Argentina
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